Etiquetas
Alcalde Presidente, Alfonso Ruescas Martínez, Bautista Sánchez Rico, campo de criptana, Casino de la Concordia, Celestino Martínez Santos Palmero, Concejal, Consistorio, Domingo Esteso Maldonado, El Liberal, Fernando Treviño Suárez de Figueroa, Francisco Bustamante García, Francisco Moratalla Bustamante, Hilarión Escobar Sánchez, Jacinto Cuadra Ramos, José Gregorio Ortiz Carrasco, Juan Manuel de la Guía Angulo, Julián Martín Casero Palomino, Manuel Granero, Manuel Lara Calonge, Maximino Cuadra, Nazario Lara Carrasco, Proceso Girón Jareño
En 1912 constaba el Ayuntamiento de Campo de Criptana de 15 concejales. El alcalde-presidente era Celestino Martínez Santos Palmero, de quien tanto hemos hablado ya en este blog en relación a su intensa actividad social y política en Campo de Criptana. Fue aquél el año en que, bajo su mandato como alcalde, publicó el periódico El Liberal (núm. 11.937, del jueves 11 de julio) un amplio reportaje sobre la localidad; en él se alababan sus excelencias y, al paso, se ponderaba muy favorablemente la personalidad y dedicación de su alcalde. Recordemos que este periódico nos decía sobre Martínez Santos que era:
… persona de tan vasta inteligencia… joven abogado de grandes iniciativas y mejor posición, que, en unión del celoso secretario D. Manuel Granero y oficial D. Maximino Cuadra, no se dan momento de reposo por que todo marcha dentro de los límites de la honradez y la más escrupulosa administración.
Como ya dijimos (véase: Campo de Criptana en 1912, II: El Ayuntamiento) fueron aquellos unos años cruciales en Campo de Criptana, intenso periodo de cambios en todos los sentidos. En este aspecto, su alcalde, Martínez Santos, impulsó como pocos la economía y el desarrollo de su pueblo. Sumemos al panegírico del periódico El Liberal, el reportaje sobre Criptana que publicó el periódico Heraldo de Madrid, año XXIII, núm. 7.896, del domingo 14 de julio de 1912, y obtendremos una idea muy completa de cómo era la localidad entonces, de cómo se vivía en aquellos tiempos y quiénes impulsaron su desarrollo (véase: El Ayuntamiento de Campo de Criptana en 1912). Recordemos, como no podía ser de otra manera, y ya fuera del ámbito estricto de la política, que también en 1912 Celestino Martínez Santos presidía una institución social paradigmática en Campo de Criptana: el Casino de la Concordia (véase: El Círculo de la Concordia, Campo de Criptana, 1912). En fin, como se puede ver, fue Martínez Santos una persona de actividad incansable.
Y hay más datos sobre el ayuntamiento criptanense en aquel año. Los encontramos en el Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real, del 14 de febrero de 1912 (pág. 7), donde se publica su composición completa. Formaban parte de él, además del alcalde presidente ya citado Celestino Martínez Santos, las siguientes personas:
Julio Martín Casero Palomino. Primer teniente alcalde.
Francisco Bustamante García. Segundo teniente alcalde.
Bautista Sánchez Rico. Tercer teniente alcalde.
Nazario Lara Carrasco. Regidor Síndico.
Juan Manuel de la Guía Angulo. Regidor Síndico suplente.
Manuel Lara Calonge. Regidor Interventor.
Hilarión Escobar Sánchez. Concejal.
Jacinto Cuadra Ramos. Concejal.
Fernando Treviño Suárez de Figueroa. Concejal.
Alfonso Ruescas Martínez. Concejal.
Proceso Girón Jareño. Concejal.
José Gregorio Ortiz Carrasco. Concejal.
Francisco Moratalla Bustamante. Concejal.
Domingo Esteso Maldonado. Concejal.
Sigue luego la lista de los mayores contribuyentes de Campo de Criptana. A la cabeza figuraba Alfredo Ruescas Rodríguez, que pagaba una contribución de 2.281 pesetas y 1 céntimo; seguía Mariano Quirón Alarcón, con 1.569 pesetas y 78 céntimos. Entre estos concejales había algunos que también, en algún momento de aquel periodo, fueron alcaldes de Campo de Criptana, como Faustino López López (véase: Una crónica de Campo de Criptana en 1916, y En busca de Alces: La exploración del académico Antonio Blázquez, 1917), Domingo Esteso Maldonado (véase: El alcalde Domingo Esteso Maldonado y la cuestión de las escuelas, Campo de Criptana, 1922), y Jacinto Cuadra (véase: Jacinto Cuadra, político, viajero y alcalde, Campo de Criptana, 1909-1914).
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO
Gracias por hablar tan bien de mi bisabuelo Celestino. 🙂
Me ha emocionado esta noticia sobre mi abuelo. Gracias por su publicacion
Pingback: El frustrado robo en el Ayuntamiento (Campo de Criptana, 1908) « Criptana en el tiempo
Pingback: La ilustre visita episcopal (Campo de Criptana, 1911) (V): La comunión y los padrinos | Criptana en el tiempo
Pingback: Los monárquicos liberales de Campo de Criptana (1871) (IX): Antonio Gullón | Criptana en el tiempo
Pingback: Obras, obras… y más obras (I): Campo de Criptana, 1927 | Criptana en el tiempo
Pingback: Los fastuosos funerales del párroco Ramón Cano Paños (Campo de Criptana, 1912) | Criptana en el tiempo
Pingback: La otra cara de la moneda: Las necrológicas del periódico “Sancho Panza” (Campo de Criptana, 1912) | Criptana en el tiempo
Pingback: ¡Agua!… por fin (Campo de Criptana, 1912) (II) | Criptana en el tiempo
Pingback: El indiscreto encanto de la prensa: Los que viajan (Campo de Criptana 1912-1913) | Criptana en el tiempo
Pingback: Campo de Criptana en 1911 (III): Los abogados | Criptana en el tiempo
Pingback: Celestino Martínez-Santos Palmero, alcalde… y cosas de la enseñanza criptanense (Campo de Criptana 1912-1913) | Criptana en el tiempo