Etiquetas
Alcalde, Alejandro Fernández, Arenales de San Gregorio, Bautizo, Boda, Burocracia, campo de criptana, Capital, Ciudad Real, Clérigo, Comisionista, Concejal, Corresponsal, El Pueblo Manchego, Enfermedad, Especioso Perucho Granero, Funcionario, Indisposición, Intereses, Jacinto Cuadra, Maximino Cuadra, Necrológica, Parroquia, Párroco, Peariódico, Petición de mano, Pluriempleado, Política, Polifacético, Prensa, Primera misa, Propietario, Provincia, Pueblo, Sociedad, Templo, Viajeros
Que el periódico provincial El Pueblo Manchego tenía una sección fija de “Ecos de Sociedad” ya lo decíamos ayer. Decíamos también que tenía varias subsecciones, tantas como acontecimientos tuviesen que ser reseñados. Era esta sección auténtico cajón de sastre en el que cabía casi todo: bodas, bautizos, peticiones de mano, enfermedades, indisposiciones varias, necrológicas breves… y también los viajes de los conocidos, sus ires y venires a la capital de la provincia desde los diferentes pueblos. Fue quizá este tipo de acontecimientos el que proporcionó más materia al redactor de la sección. Ciudad Real era el centro burocrático de la provincia y, tarde o temprano, había que ir desde los pueblos de la provincia a “arreglar papeles”, como suele decirse. Nadie con posibles escapaba a la mirada del redactor; ningún propietario, ningún conde, duque o marqués, o clérigo, o alcalde, o concejal de la provincia, ningún funcionario de alto rango podía hacer un viaje de incógnito. El indiscreto encanto de la prensa daría noticia de todo.
Traemos hoy más ejemplos tomados de este mismo periódico El Pueblo Manchego. Hay una particularidad respecto a lo dicho hasta ahora. Se comenzó este periódico a publicar en Ciudad Real en el año 1911 y en sus primeros números aún no se había acuñado la expresión “Los que viajan” como subtítulo de la sección. El primer subtítulo fue “Viajes”, y nada más. Un ejemplo es el número 7, del año I, del 10 de enero de 1911 al que haremos referencia a continuación. Las otras reseñas de viajeros criptanenses corresponden a números del mismo periódico del año 1912.
Año I, núm. 7, 10 enero 1911:
Ha llegado de Campo de Criptana nuestro distinguido amigo D. Jacinto Cuadra, alcalde de aquella localidad.
Año II, núm. 390, del 26 de abril de 1912:
De Campo de Criptana ha llegado el propietario D. Maximino Cuadra.
Año II, núm. 442, del 28 de junio de 1912:
Para el Campo de Criptana ha salido don Especioso Perucho Granero.
Jacinto Cuadra ha sido protagonista de varios artículos en este blog. Fue hombre polifacético, de variados intereses, de intensa vida en política y en cuestiones municipales. Y fue, también, como dice esta nota, alcalde criptanense. Era Jacinto Cuadra de los hombres que no paraban quietos. Fue corresponsal de prensa en Campo de Criptana, fue comisionista y fue, además, pluriempleado (véanse: Jacinto Cuadra, corresponsal, comisionista y pluriempleado, Campo de Criptana, 1882-1903; Jacinto Cuadra, político, viajero y alcalde, Campo de Criptana, 1909-1914).
De otro Cuadra, en este caso de nombre Maximino, de cuyo viaje a Ciudad Real se da cuenta en el número del 26 de abril de 1912, también hemos hablado en este blog. Era corresponsal de este periódico y fue él a quien el párroco de Arenales de San Gregorio, Alejandro Fernández, le remitió una carta para su publicación. En el escrito pedía el párroco ayuda para poder construir un “templo parroquial” en Arenales. Maximo Cuadra, en efecto, publicó la carta en el núm. 403, año II, del 11 de mayo de 1912 (véase: El corresponsal Maximino Cuadra y la Iglesia de Arenales, Campo de Criptana 1912).
Por último, de Especioso Perucho Granero, sabemos por este mismo periódico (año IV, núm. 1.124, del 7 de octubre de 1914) que en ese año dijo su primera misa en la iglesia parroquial de Campo de Criptana. Como dijimos en su momento, Especioso Perucho fue asesinado el 19 de agosto de 1936 (véase: Sacerdotes en Campo de Criptana, 1832-1914).
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO
Pingback: Los viajes del seminarista Especioso Perucho Granero (Campo de Criptana 1911-1914) | Criptana en el tiempo