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Andrés Reíllo López, Antonio Reíllo López, Ayuntamiento, Biografía, Calle de la Virgen, Calle Empedrada, Calle pintado, Calle Reina Cristina, Callejero, campo de criptana, Contribuyente, Economía, Elector, Felipe Palmero Fermoso, José María Reíllo Pizarro, Junta Municipal, Manuel Cereceda Ballesteros, Plaza del Pozohondo, Ramón Reíllo López, Reíllo, Sociedad
Hay veces en que uno se pone a escribir sobre un tema y se va enredando y enredando y el ovillo se hace cada vez más grande… y entonces uno no sabe cómo acabar. Quizá eso nos esté pasando con esta serie sobre la conformación de la Junta Municipal de Campo de Criptana para el periodo de 1892-1893, que inicialmente iba para dos artículos, y cumplimos ya con éste los seis. Y, por precaución, además, no diremos que sea este el último; no lo sabemos, por hoy. Mañana lo veremos.
No parecía muy adecuado que afloraran nombres del pasado criptanense y que todo quedase ahí, solo en unos nombres, sin más ni más (véanse: La conformación de la Junta Municipal, Campo de Criptana 1892, II; y La conformación de la Junta Municipal, Campo de Criptana 1892, III). No diremos que les vamos a poner cara a esos criptanenses ni que vamos a narrar sus biografías con pelos y señales, porque eso no sería posible en este momento y, consideramos, no es esa la función que nos corresponde. Nos conformaremos con situarlos en el plano social y económico de Campo de Criptana a finales del XIX, y también en su callejero, puesto que de casi todos ellos conocemos su dirección por aquel entonces.
Nos ocupamos hoy del grupo de «Medianos contribuyentes» que formaban la segunda sección. Eran Antonio Reíllo López, Manuel Cereceda Ballesteros y Felipe Palmero Fermoso. Nos vamos, como en días anteriores, al listado de contribuyentes electores de Campo de Criptana que se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real del 8 de enero de 1890.
Ninguno de ellos tenía contribuciones por encima de las 1.000 pesetas. Por ejemplo, Manuel Cereceda Ballesteros pagaba 701,03 pesetas. Tenía su residencia en la calle Pintado (actual Reina Cristina), núm. 3. Nos llama la atención, sin embargo, que Felipe Palmero Fermoso, que vivía en la Plaza del Pozohondo núm. 4, aparezca en este grupo siendo que en 1890 pagaba una contribución de 44,43 ptas. Por su parte, Antonio Reíllo López, con residencia en la calle Empedrada (actual calle de la Virgen), núm. 10, pagaba una contribución de 235,50 ptas.
Curiosamente tres Reíllo López encontramos en aquel listado de contribuyentes de 1890 en Campo de Criptana. Uno era el citado Antonio; los otros dos eran Andrés Reíllo López, que pagaba una contribución de 65,24 ptas. y vivía en la Plaza Pozo Hondo, núm. 1, y Ramón Reíllo López, que pagaba 45,56 ptas. y vivía también en la calle Empedrada, en este caso en el núm. 13. Pero no nos vayamos de la calle Empedrada, porque otro Reíllo encontramos que vivía en ella en aquel tiempo, en este caso en el número 4. Era José María Reíllo Pizarro, y pagaba una contribución de 319,54 ptas.
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO