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Tiene de bueno la búsqueda en hemeroteca que se encuentran informaciones muy interesantes sobre el pasado; tiene de malo que, para muchas pequeñas historias, encontramos su comienzo y su nudo, pero a veces no hallamos el desenlace. Parece, y lo he dicho muchas veces, que las noticias se agazapen en el inmenso e impenetrable corpus de la hemeroteca, en cualquiera de sus rincones, entre sus páginas, para aparecer cuando a ellas les da la gana y no cuando conviene al buen y satisfactorio desarrollo de una pequeña historia como cualquiera de estas que contamos en este blog. Pero hay muchas sorpresas, porque a veces, en efecto, estas noticias aparecen (ciertamente cuando a ellas les da la gana), pero bienvenidas sean, aunque a veces a destiempo, si nos permiten dar por acabado un pequeño episodio de la vida cotidiana criptanense de otros tiempos.

Fumata blanca: Foto de José Manuel Cañas Reíllo (2016)
Viene todo esto a cuento porque en el artículo que publicábamos el día 9 de este mes de marzo, A. D. 2016, nos ocupábamos de una pasantía que se convocaba en la escuela de niños del maestro José María López Manzanares. La convocatoria se hizo pública, conviene recordarlo en la sesión ordinaria del Ayuntamiento de Campo de Criptana del 26 de enero de 1880 (véase: Un «pasante» para la escuela y disquisiciones lexicográficas, Campo de Criptana 1880). Y ahí lo dejábamos todo… por el momento.
Porque hoy ha tenido lugar una de esas sorpresas que nos depara el destino, pues buscando, buscando y buscando en la hemeroteca, hemos hallado la resolución de tal convocatoria. Y no tardó mucho ésta, porque en la sesión ordinaria del ayuntamiento criptanense del 9 de febrero de ese mismo año, es decir, trece días después de hacerse la convocatoria, ya había fumata blanca en el Ayuntamiento y en la escuela del maestro López Manzanares. ¡Había ya pasante! Y además ya se aprovechó tal ocasión en que estaba la corporación reunida, para su nombramiento oficial. Todo esto se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real del 3 de marzo de 1880. Veamos cómo fue el punto del día correspondiente en que se acordó transcribiendo el texto tal y como se publicó, con sus peculiaridades ortográficas incluidas:
Nombrar pasante para la Escuela del Maestro D. José María Lopez Manzanares, con la gratificacion de 150 pesetas hasta el fin de junio, á D. Ramón Lopez Manzanares.
Y, como puede suponer el lector, era el tal pasante con casi total seguridad hermano o hijo del maestro titular, puesto que hay que tener en cuenta aquí que «López Manzanares» es apellido compuesto. Es sin duda, José María López Manzanares la misma persona que José María Manzanares Villanueva que aparece citado como una de las capacidades en el listado de contribuyentes electores de Campo de Criptana que se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real del 8 de enero de 1881. Aparece como «Maestro de primera enseñanza» con residencia en la calle de Santa Ana, núm. 8. Por cierto, encontramos años después, ya en el siglo XX, a otro criptanense que también llevaba este apellido compuesto, López-Manzanares. Es José María López-Manzanares Yangües, que estudió en la Facultad de Ciencias de la Universidad Central de Madrid. Se formó su expediente académico en los años 1926/28 (Archivo Histórico Nacional, Universidades 5796, Exp. 25).
Todo esto ocurría en tiempos del mandato del alcalde accidental de la localidad José Millán, ejerciendo como secretario del Ayuntamiento criptanense Francisco Aparicio Sureda.
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO