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Abuso, Alcoy, Alicante, campo de criptana, Denuncia, Destinatario, Diccionario, DRAE, El Serpis, Empresa, Ferrocarril, Gaspar y Roig, Misterio, Periódico, San Cucufato, San Donato, Trigo, Vagón

Los muelles de la estación: Foto de José Manuel Cañas Reíllo (2016)
Es bien sabido que en casos desesperados de pérdidas o desapariciones de objetos es conveniente, y también sano, recurrir a san Donato o a san Cucufato, atándoles sus correspondientes atributos hasta que el deseado hallazgo se produzca. Una vez resuelta la pérdida, entonces es deseable, como dictan las buenas costumbres, desatarles los susodichos. Eso es efectivo en caso de pérdida de unas llaves, de una cartera, de una moneda y de no se cuántas otras pequeñas cosas más. Sin embargo, habría que demostrar su utilidad en el caso de pérdidas más voluminosas, como un vagón de trigo desaparecido, casi esfumado, de la noche a la mañana. El tal vagón había partido un día de finales de 1880 de la estación de Campo de Criptana con destino a Alcoy, pero nunca llegó el trigo a su destino. ¿Qué fue de aquel vagón? ¿Dónde estaba aquel trigo? ¿Perdido? ¿Robado?…. o quizá ¿abducido? Misterioso y arcano asunto, sin duda, éste sobre el que no había una explicación.
El asunto llegó a la prensa en forma de denuncia y fue objeto, en consecuencia, de una nota publicada en el periódico de la mañana de Alcoy El Serpis, año IV, núm. 837, del 19 de febrero de 1881. Dice así:
Una buena prueba de la necesidad que existe de la formación de una Liga contra los abusos cometidos por las empresas de los ferrocarriles, es el siguiente hecho que se nos denuncia.
El día 23 de Diciembre del pasado año de 1880 se consignó para esta ciudad [Alcoy] un wagon cargado de trigo en la estación de Criptana de la línea de Madrid á Alicante, y á estas fechas, apesar (sic) de las reclamaciones entabladas y del tiempo trascurrido, ni el destinatario sabe el paradero del wagon indicado, ni ha sacado nada en limpio de las gestiones y demandas ante la empresa del ferrocarril.
Escusamos (sic) comentarios.

La estación: Foto de José Manuel Cañas Reíllo (2016)
Así pues, a fecha de 19 de febrero de 1881 seguía sin aparecer aquel vagón misteriosamente desaparecido, casi dos meses después de su partida de la estación de Campo de Criptana. La cosa no quedó aquí. Después el representante del ferrocarril en la ciudad saldría al frente de esta denuncia, pero esto es asunto de otro día.
Obsérvese el uso aquí del término «wagon». Es un anglicismo que, sin duda, se usó en los primeros años de implantación del ferrocarril en España. Así, por ejemplo, se encuentra recogido en el Diccionario Enciclopédico de la Lengua española de Gaspar y Roig, suplemento segundo, Madrid 1855, pág. 21, aunque remite ya a «vagón». Del mismo modo aparece de vez en cuando en otros diccionarios posteriores hasta 1931, entre ellos el de la Academia de la Lengua de 1869 (pág. 803) y también, en este caso, remite a «vagón». Este término, ya españolizado, es el usual en la actualidad y el que aparece recogido en el DRAE en referencia a los «vehículos de viajeros o de mercancías y equipajes» y en los ferrocarriles.
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO