Etiquetas
Alcalde, Antonio Machado, Antonio Ortega, Arenales de la Moscarda, Arenales de San Gregorio, Úbeda, Baeza, Banda Municipal de Ciudad Real, Biblioteca Pública Municipal, campo de criptana, Canto, Celedonio Cedenilla, Cerro, Chacona de Vitali, Chopin, Compositor, Concierto, Cristóbal Ruyra, Director, Ejército, Estrellita de Ponce, Filarmónica Beethoven, Himno a Criptana, Homenaje, José Antonio Sánchez Manjavacas, José González Lara, José V. Ortiz Muro, Jota de Falla, Jouperin, Juan María Alonso Orduña, La Preciosa, Lanza, Maestro, Manuel Angulo López-Casero, Manuel Angulo y Sepúlveda, Mazurca, Músico Mayor, Melodía negra de L. J. Wite, Olivo, Paisaje, Piano, Poesía, Premio Sarasate, Real Conservatorio de Música de Madrid, Recuerdo de José Achron, Romanza Andaluce, Sarasate, Saturnino González Rubio, Segundo GArmendia, Tango de Albéniz, Tierras Llanas, Vandelvira, Violinista, Zortzico
Podría en esta ocasión el que escribe justificar su ausencia en los últimos días en este blog en un «estar por los cerros de Úbeda». No es así la cosa, pero sí por los «cerros de Baeza», por sus calles tan evocadoras, se mire por donde se mire, de Vandelvira, con la presencia casi constante del recuerdo de Antonio Machado, allí su busto, allí su nombre, más allá su antigua aula… observados, por todas partes, por el interminable paisaje de olivos. Pero aquí estamos de nuevo, y volvemos a retomar el hilo cotidiano de publicaciones en este blog.
Nos situamos hoy en 1946, primeero en en Arenales de la Moscarda, la actual Arenales de San Gregorio, entonces parte del término criptanense y luego en Campo de Criptana.
Arenales de la Moscarda (17 de marzo)
El 17 de marzo tuvo lugar un acontecimiento musical… un importante acontecimiento, sin duda extraordinario. Y de todo dio cuenta el periódico Lanza, del lunes 25 de marzo de ese año en un artículo titulado «Acontecimiento artístico en Arenales de la Moscarda». Fue un concierto de violín y fue el intérprete Juan María Alonso Orduña, «premio Sarasate del Real Conservatorio de Música de Madrid». Así se dice en Lanza. Y conocemos también el programa, porque también Lanza nos lo desgrana.
«Recuerdo de José Achron», Melodía negra de L. J. Wite; Mazurca de Chopín, «Estrellita de Ponce»; Jota de Falla, «Chacona de Vitali»; «La Preciosa», de Jouperin; Tango de Albéniz; «Zortzico», de Sarasate; Romanza andaluza de Sarasate.

Con un violín (Vista parcial del cuadro «Bodegón del violín»): Óleo de José Manuel Cañas Reíllo (1991)
Esto fue en Arenales de la Moscarda.
Campo de Criptana (16 de febrero)
Y unos días antes, el 16 de febrero, participó Juan María Alonso Orduña, con otros músicos, en el «Homenaje al Director de la Banda de Música ‘Filarmónica Beethoven’ de Campo de Criptana». Y también nos lo contó Lanza, en este caso en el número correspondiente al miércoles 13 de febrero de 1946, como anuncio previo del acto. Tuvo lugar el acto en el Teatro Cervantes y fueron dos los homenajeados: Manuel Angulo y Sepúlveda, «por su magna labor como Director de la Banda de Música ‘Filarmónica Beethoven’, y Saturnino González Rubio, «en reconocimiento a su entusiasmo y trabajo por este Arte». Habría de ser un acto muy lucido, sin duda. Participarían el Director de la Biblioteca Pública Municipal criptanense, José Antonio Sánchez Manjavacas, «los laureados Maestros y compositores…:
… Don Antonio Ortega, Músico Mayor del Ejército y don Cristóbal Ruyra, Director de la Banda Municipal de Ciudad Real, sumándose a este homenaje con la interpretación de sus obras, entre las que figura una selección de «Tierras Llanas»…
Y hubo más participantes en el acto, y entre ellos estaba también Juan María Alonso Orduña, violinista. Manuel Angulo López-Casero estuvo a cargo del piano, Segundo Garmendia del canto y José González Lara de las poesías. Y asistió también, como no podía ser de otra manera, el alcalde criptanense, y se cerró el acto con el Himno a Criptana, el de José V. Ortiz Muro con música de Celedonio Cedenilla.
Y así, un violín y su intérprete, Juan María Alonso Orduña, nos han guiado por conciertos en tierras criptanenses en febrero y marzo de 1946… en Campo de Criptana y en Arenales de la Moscarda.
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO
Yo era un crío cuando tuvo lugar este acontecimiento, pero de alguno de los personajes mencionados guardo muy vivos recuerdos; así, por ejemplo, la admiración por don Manuel Angulo. Pero sin duda he de subrayar mi gratitud y afecto por don José Antonio Sánchez Manjavacas: gracias a él se despertó mi amor por la literatura. De todos los profesores de mis años mozos él es, con mucho, quien todavía me acompaña en los recuerdos. Todo ello lo resume admirablemente el bodegón que ilustra el artículo de hoy.
Estimado Vicente: Muchas gracias por compartir el recuerdo. Es curioso que lo que para mí aquí es historia, para muchos lectores es parte de su vida. Me alegra que se pueda cerrar ese círculo, historia – vida, y, sobre todo, que estos escritos puedan reavivar, aunque sólo sea por un instante, tantos recuerdos. Al final, este blog no es sino eso, recuerdos, evocaciones… como usted decía muy a menudo, nostalgias. Muchas gracias, de nuevo.
Pingback: Del músico Saturnino González Rubio… algunas notas biográficas sueltas y dispersas con referencias esporádicas a sus coetáneos (Campo de Criptana 1887-1921) | Criptana en el tiempo