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Artículo, Blog, campo de criptana, Cotidiano, Criptana en el tiempo, Generación, Historia, Historias, Materia, Memoria, Microhistoria, Mirilla, Nostalgia, Olvido, Recuerdo, Rutina

De nostalgias y otras cosas: Foto de José Manuel Cañas Reíllo (2016)
Y así, como quien no quiere la cosa, otro año más pasa por «Criptana en el tiempo», que es como decir que un año más pasa por uno, el que escribe… un año más y a la vez un año menos. Es ya con esta la sexta vez que despedimos año en «Criptana en el tiempo» desde aquel ya lejano 2012, año primero de este blog… y aquí estamos con más de dos mil artículos publicados y con más de trescientas mil visitas. Ha sido, sin embargo, así hay que reconocerlo, el 2017 año anómalo para este blog, año de prolongadas ausencias que por un tiempo nos han mantenido alejados de la escritura cotidiana. A lo mejor esto no está mal; a lo mejor hay que evitar que lo cotidiano se convierta en rutina, en camino trillado en exceso, en repetición y en un perpetuo déjà vu.
Y llegará el 2018 y este blog seguirá vivo, no sabemos si con o sin ausencias como en 2017, pero seguirá. Queda mucha materia que tratar, aunque parezca mentira después de seis años, y quedan muchos artículos que escribir y muchas historias que contar. Reconoce el que escribe que no puede dejar de asomarse por la mirilla del tiempo, esa que nos traslada haciéndonos camino entre las brumas del olvido, a momentos diferentes del pasado criptanense, que nos hace recorrer calles de otros tiempos, contemplar casas ya inexistentes y recuperar del baúl de los recuerdos nombres de otras generaciones.

De lo cotidiano: Foto de José Manuel Cañas Reíllo (2016)
«Memoria». Ésta es la palabra clave de este blog. Y también lo es «recuerdo». Y cómo no, también lo es nostalgia, lo reconoce el que escribe. Todo tiempo pasado no siempre fue mejor, pero esto no significa que todo fuese peor. Entre el blanco y el negro hay muchos grises, y entre los grises hay muchas modulaciones que son, sin duda, las que construyen esa memoria, las que dan forma a estas nostalgias. Sólo con ellas como referencia, se puede comprender cuál es la verdadera esencia de este blog: No es la historia, en palabras mayores, su objetivo, sino que su auténtica razón de ser son las historias de la vida cotidiana, del día a día del Criptana y de los criptanenses de otros tiempos… en fin, la microhistoria, como diría Raquel.
Queda como un cabo suelto este artículo, después de esta segunda gran ausencia de escritos en el blog en este año que acaba. Un cabo suelto, sin embargo, era necesario en este momento para despejar dudas sobre la continuidad de este blog. Seguirá, como ya se ha dicho, y no sabemos por cuánto tiempo. Reconoce el que escribe que estos artículos son ya una necesidad cotidiana… casi como el comer (aunque uno también haga, de vez en cuando, régimen).
JOSÉ MANUEL CAÑAS REÍLLO
No hay sino expresar a la comunidad de seguidores y, claro está, al autor, los mejores deseos para el año que va a omenzar
GRACIAS con mayúsculas con ausencias o no estás ahí formando parte del tiempo de este «Criptana en el tiempo». Gracias por abrir una ventana llena de historias del pasado que conviertes en presente.